Su nombre japonés, Rem, proviene de la "fase REM", la fase del sueño asociada con los sueños.
Su nombre inglés, Sherb, proviene del inglés "sherbet" (sorbete), un tipo de helado.
Su nombre español, Morfeo, proviene directamente de Morfeo, dios de los sueños de la mitología griega. Su nombre también podría hacer referencia al sueño de movimientos oculares rápidos, conocido por las siglas MOR (en relación con su personalidad perezosa y la tendencia a contar ovejas o cabras al irte a dormir).
Su nombre alemán, Morpheus, proviene directamente de "Morfeo".
Su nombre francés, Capri, deriva del "capricornio", el décimo signo del zodíaco.
Apariencia[]
Morfeo es una cabra de color azul claro, con el cabello de color azul oscuro, tiene dos cuernos de color blancos con rayas de color gris, el interior de sus orejas son de color amarillo, tiene ojos amplios y ovalados con grandes pupilas de color negro y tiene las mejillas de color rosa. Sus pezuñas son blancas.
Personalidad[]
Morfeo tiene la personalidad vaga, por lo que será amigable y fácil de tratar debido a su estilo de vida relajado. Como a todos los vecinos vagos, a Morfeo le encanta comer y el descansar, disfrutará de participar en sus pasatiempos comunes, que generalmente tienen que ver con relajarse o comer, como la pesca. Morfeo se llevará bien con los otros vecinos, pero puede ofender o confundir a los vecinos deportistas, que tienen un estilo de vida de lleno de ejercicio y de buen estado físico, en comparación con el estilo de vida perezoso de Morfeo. Morfeo se llevará bien con otros vecinos vagos con los que hablará sobre comida y cómics. También se llevará bien con vecinas dulces, vivarachas, petulantes, familiares, y ocasionalmente con vecinos picajosos, pero pueden de vez en cuando molestar a las vecinas altaneras, que no están de acuerdo con el estilo de vida perezoso.
Si no sabes de qué hablar con Morfeo, pregúntale que tal ha dormido esa noche. No hay tema que le entusiasme más. Ah, y no te lo tomes como algo personal si se queda sopa en mitad de la conversación.
Si no sabes de qué hablar con Morfeo, pregúntale cómo durmió esa noche. No hay tema que le entusiasme más. Ah, y no te lo tomes personal si se queda dormido en medio de la conversación...